`Tygra, Hielo y Fuego´-cuando Ralph Bashki nos deleitó con una gran película de animación-

Hay películas por las cuales sientes una gran devoción. Quizás sea el momento en que la ves, pero el paso del tiempo te acaba dando la razón. Es una buena película, ya que sigues sintiendo lo mismo que la primera vez que la viste. A mí me pasa con «Tygra, Hielo y Fuego» (Fire and Ice). Dirigida por un maestro de la animación como es Ralph Bakshi. Una aventura ambientada en tiempos remotos. Esos en los cuales Conan marcaba su ley a base de espadazos a los hechiceros o bandidos de turno. Lo mejor de todo es que la técnica que empleó el director me sigue convenciendo aún habiendo pasado más de un cuarto de siglo (fué estrenada en 1983). Al igual que hizo en la adaptación animada de «El Señor de los Anillos» (la cual acababa a mitad del segundo libro, más o menos), sus dibujos se basaban en personas de carne y hueso. Rodaba escenas con ellos y luego los trasladaba en su versión animada dibujando «encima de ellos». De ahí la naturalidad de los movimientos de los personajes a la hora de moverse o las expresiones que nos ofrecen. En el otro extremo de lo que estamos viendo en estos tiempos, donde la era digital se ha impusto y poco se atreven con la tradicional. Pero si tenéis la ocasión no la visioneis con prejuicios.

La película contiene los típicos elementos del género. Espada, brujería, acción, violencia y algunas dosis de sexo. Lo último lo ofrece la voluptuosa Tigra. Probablemente la película animada donde el cuerpo femenino desprende sensualidad por los cuatro costados (si obviamos a Jessica Rabbit. Aunque es más irreal). No en vano cada vez que aparece dicho personaje la temperatura sube hasta extremos insospechados. Muchos de los que vieron la película en su momento la recordaran por esas escenas. Y es que Tygra es el eje central de la historia. Ya en el título en castellano los traductores españoles eligieron que su nombre se antepusiese al original.

No cabe duda de que Bakshi realizó un buen trabajo condensando en 81 minutos una historia que de haber sido alargada habría cojeado bastante en su valoración final. A veces una duración normal es lo mejor.

Sin embargo, si aparcamos la presencia física de la princesa del fuego y de su acompañante Larn (con quien acabará al final de la película como es evidente), hay dos personajes que brillan con luz propia. Nekron y Darkwolf. El primero representa al villano de la función. Un hechicero dominado por la locura que domina el hielo (aparte de tener poderes telepáticos) y quiere que el rey del fuego obedezca sus órdenes al tener en su poder a su hija. Osea, el típico plan de secuestro y exigencia. Que por supuesto intentarán evitar los protagonistas de turno. Uno de elos Darkwolf. Y es que encontrarse con él, verlo en acción, es puro placer para el espectador. Hacha en mano, curtido en mil batallas, demostrando que los grandes desafíos los cubren personajes como él, acaba siendo el centro de atención en los escasos (o así parecen) minutos que sale.

Se podría criticar la poca originalidad de la obra. Incluso las aventuras en cómic de Conan el Bárbaro (exponente máximo de la fantasía heróica) acababan volviéndose repetitivas debido al elevado número de cómics que protagonizó. Pero precisamente los  personajes y muchas de las situaciones que protagonizan en esta película, son los que la convierten única. Con un final excelente, donde el bien (Darkwolf) y el mal (Nekron) se enfrentan en una lucha sin cuartel. En su momento la crítica y el público no aceptaron tal propuesta, dándole la espalda. Sin embargo, el paso del tiempo la ha convertido en una obra de culto. Muy alabada y figurando en algunas listas que agrupan las mejores cintas de animación. Sin lugar a dudas una opción muy viable para recordar como se hacían las cosas hace años.

CÓMO CREAR EL MUNDO DE TIGRA

 

TRAILER DE «TYGRA, HIELO y FUEGO»

 

 

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Fdo: Snake