Así Empezó Todo – “Los duelistas”, de Ridley Scott

Después de un corto en 1965 (Boy and Bicycle), en el que su hermano Tony era el protagonista, y de trabajos para series televisivas, Ridley se lanzó al ruedo de la dirección cinematográfica en 1977 con “Los duelistas”, cuyo guión estaba basado en una novela de Joseph Conrad.

Esta ópera prima de Scott, poco valorada en su momento, tachada sobre todo, de estar rodada a un ritmo excesivamente lento, a lo largo de los años ha ido ocupando el verdadero lugar que le pertenecía, y hoy en día se la considera una película de culto.

El título de “culto” que alcanzan muchas películas que en su estreno fueron poco valoradas, o consideradas simplemente malas, mete en el mismo saco a excelentes películas, y a verdaderos bodrios (de culto son las películas de Ed Wood, y siguen siendo malísimas aunque las veamos con ojos condescendientes). “Los duelistas” nunca tendría que haber entrado en esa categoría, porque su calidad era la misma en el año 1977, que en la actualidad.

Su puesta en escena que nos recuerda al “Barry Lyndon” que nos había ofrecido Stanley Kubrick dos años antes, es impecable, y su fotografía, perfecta. Contiene una de las más inquietantes bandas sonoras, y si la película nos habla de dos duelistas, excelente es el duelo interpretativo de los dos protagonistas, un por entonces prometedor Keith Carradine, (que se quedó poco a poco en el camino después de algunas buenas actuaciones posteriores, y que ahora podemos ver en la serie “Dexter”, con algunos añitos mas a las espaldas), y un Harvey Keitel, que ya había dado muestras anteriores de su calidad interpretativa, y que en esta película nos ofrece una gran talla como actor.

No podía pedírsele mucho más a una película que reunía tantos puntos positivos, pero por lo que fuera, “no cayó de pié”, y se la relegó durante tiempo a un segundo plano entre la posterior filmografía de su director.

Scott, que tiene verdaderas joyas cinematográficas en su haber “Blade Runner”, “Alien”, o “Thelma y Louise”, es un director muy irregular, y carece de sello propio, pero ya solo por esta su primera película, tendría que haber pasado a la historia del cine.

Trailer (en inglés)

 

Swanson 

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  1. #1 por Forni el 17 julio, 2008 - 22:07

    Esta me falta por ver, pero pienso remediarlo prontamente.

    Sólo quería comentar que estoy muy de acuerdo con tu frase final sobre Ridley Scott. Tiene en su haber tres películas de las imprescindibles en la historia del cine («Alien», «Blade Runner» y «Telma y Louise»), pero a mi entender es que se juntaron una muy buena historia con un maravilloso diseño de producción. Las demás que he visto de él me siguen pareciendo maravillosas en el diseño de producción, pero las historias no estás a la altura. Y cuando la historia no está a la altura hace falta ser muy muy muy buen director para que el diseño de producción justifique la cinta (tal vez salvaría «Tormenta Blanca», pero por lo de «Club de los algunos marineros buenos muertos» que tiene; con «El Reino de los Cielos» me ha dormido las dos veces que la he comenzado…).

    En ese aspecto creo que es más sincero su hermano Tony. Es más un profesional que pone su buen conocimiento de dirigir cine al servicio de la industria de las palomitas. Y no le salen películas aburridas.

  2. #2 por Swanson el 17 julio, 2008 - 22:50

    Remediálo, y esperamos tu opinión, Forni.

    Sobre lo que dices acerca de la conjunción de buenas historias, y excelente diseño de producción, yo también estoy de acuerdo contigo.

    El otro día tuve la oportunidad de ver «Un buen año», y es un ejemplo de lo que le sucede a Scott cuando la historia no tiene la suficiente consistencia. Tiene un argumento del que cualquier otro director británico (el lo es, pero no sigue los cánones de sus compatriotas) hubiera sacado un buen partido, convirtiéndolo en intimista y atractivo. Está rodado en clave de comedia, pero adolece del sutil humor inglés. Se queda a medio camino de todo, y se convierte en una película pesada y aburrida.

  3. #3 por Forni el 17 julio, 2008 - 23:58

    Prometido. Tan pronto como los hados de las telecomunicaciones me lo concedan 😉

    La verdad es que llevas una racha de películas comentadas la mar de interesantes, que hace que conociendo las que conozco (ains, la nostalgia) me interese por las que no (por eso de las sinergias de los gustos afines). Tengo pendiente por ver «La Última Primavera» (pero es un tema que requiere tener el cuerpo dispuesto), y «encoladas» ésta de «Los Duelistas» y «Lantana». Pero vamos, que en general saco buenas ideas de todos vuestros blogeros («OldBoy», «Luz Silenciosa», «Planet Terror», …).

  4. #4 por Mr. Lombreeze el 18 julio, 2008 - 14:10

    Una obra maestra del cine.

  5. #5 por Forni el 9 agosto, 2008 - 01:12

    Cuando se hace una promesa a una dama siempre hay que cumplirla, y más si es a la gran Gloria Swanson.

    Una vez oí, o tal vez leí, que Ridley Scott es un gran decorador de interiores. Esta película de soberbio impacto visual me lo ha demostrado. No es que esté rodada siempre en atardeceres o amaneceres, para conseguir largas sombras y enormes planos iluminados monocromáticos al mismo tiempo que saca texturas rugosas de los árboles y de las praderas. Yo creo que el amigo Scott situaba en persona al Sol donde quería que estuviese (donde debía de estar) al igual que colocaba la niebla, el humo, el fuego, el viento, cada gota de agua, … tratando la composición de los exteriores de igual manera que la composición de esos bodegones que nos muestra en primer plano. Me pregunto cuantas veces el pobre pajarito tuvo que repetir la escena en la que va a pararse delante de una puerta, o cuanto esperaron a tener la nube de tormenta perfecta con el Sol asomando en el punto preciso. Y todo ello sin efectos especiales a parte de la utilización de filtros en la fotografía. Ahora es demasiado habitual el retocar digitalmente la fotografía para que parezca perfecta («Cuando Nieva Sobre los Cedros», «Orgullo y Prejuicio») pero es que esta película es del 77.

    Tiene la suerte de contar con una narración de Conrad como base, que es tal vez lo que le faltó a «Barry Lyndon». Y 84 minutos menos, que es tal vez lo que le sobró a Kubrick (perdonadme la blasfemia). Así que ésta entra en el saco de sus buenas películas por doble motivo. O triple porque todos los actores están mucho más que a la altura.

    Mientras la veía me ha venido a la cabeza «Fuera de Control», por lo paranoico de la persecución testorenoica.
    Y también «Los Inmortales». Hubiera sido impactante esa historia con esta fuerza visual. Pero me temo que nos habríamos quedado sin la música de Queen.

  6. #6 por Swanson el 9 agosto, 2008 - 01:27

    Forni: Has sabido utilizar las palabras justas y adecuadas para describir lo que contiene esta película de Scott. Su fuerza visual es increíble en las fechas en las que se rodó. Con todo el resto, mas que de acuerdo.

    La comparación con «Barry Lyndon», por mi parte está admitida, y no considero blasfemia lo que has dicho. Es una gran película y un gran «cuadro». Mimada al detalle, como mimaba todo Kubrick, pero siempre he pensado que el argumento no tenía la suficiente fuerza, y que su duración era excesiva.

    Veo que te ha gustado, y me alegro de que por este «trailer de antaño» te hayas decidido a verla.

  7. #7 por Forni el 9 agosto, 2008 - 01:40

    No, no: yo es que reto a duelo por faltarme al honor a todo aquel que se meta con Kubrick y el ZX Spectrum.
    Pero también se reconocer que en los pequeños errores es donde se puede apreciar la magnificencia de las perfecciones 🙂

    «Barry Lyndon» era una de las que sólo vi por ver como quedaba eso de los interiores iluminados únicamente con velas. Kubrick pidió a Zeiss básicamente que le adaptase unas lentes que fabricaban para telescopios y utilizó película de alta sensibilidad.

    Y todavía me quedan pelis suyas por ver («Lolita», las anteriores a «Atraco Perfecto / The Killing», y «Eyes Wide Shut», aunque esta última no la considero suya).

  8. #8 por Swanson el 9 agosto, 2008 - 02:07

    No te quedan muchas, unas cinco, creo. Te las vas dosificando y acabas con su filmografía que no es muy extensa (16, si no recuerdo mal).

    ¿Como es que no has visto «Lolita»? Sería imperdonable que sí hubieras visto la de Adrian Lyne sin ver la de Kubrick.

  9. #9 por Forni el 9 agosto, 2008 - 02:16

    Pues no he visto ninguna de las dos y tampoco he leído el libro, por lo que no me tienes nada que perdonar 🙂

    La de Adrian Lyne me da pereza, pero por el libro sí que siento curiosidad.

    La de Kubrick no estaba entre mis prioridades porque tengo mis dudas sobre el tratamiento del tema en esa época y a manos del bastante misógino Stanley. Pero esto no es más que un prejuicio como otro cualquiera.

  10. #10 por Swanson el 9 agosto, 2008 - 02:33

    Te diría que leyeses el libro. Nabokov, antes que Kubrick creó una extraordinaria obra, pero te condicionaría para ver la película.

    Kubrick efectuó muchos cambios que no te encajarían con la idea que te hubieras hecho de los personajes. El principal de ellos, es el personaje de “Lolita”. Lolita es una niña pequeña (tiene 12 años, si la memoria no me falla), pero la de Kubrick está en plena ebullición adolescente.

    Lyne se aproximó mucho más al argumento en general del libro, pero ocurre con su película como con una versión que hicieron hace unos años para televisión de “El resplandor”. Es fiel a la novela, pero carece de la genialidad de Kubrick para contar la historia.

    Empieza por la película, pero lee el libro.

    Lo del tratamiento misógino… El personaje de la madre es “maltratado”, pero lo requiere.

    Fuera prejuicios. Una película de Kubrick hay que verla sin ellos. Es Kubrick.

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