Me he dado cuenta de que muchos de estos post comienzan advirtiendo al posible lector del poco tiempo del que dispongo ahora mismo para publicar con regularidad. En realidad, hace unos días creamos una cuenta de Instagram donde mi querida Andrea está compartiendo fotografías e imágenes relacionadas con el cine, y que os invito a seguir desde aquí. También hay muchas ideas y proyectos, pero creo que el problema, aparte del ya mencionado tiempo, es que estoy abriéndome a otros intereses. No quiero limitarme a hablar solo de cine, y me gustaría, dentro de algunos meses, lanzar una web de cultura general que cuente con algún colaborador que tenga las mismas ganas de escribir y hablar de arte, música, literatura, noticias, política e Historia.
Mientras ese momento llega, voy a hablaros de una canción que puede que os haya pasado desapercibida a muchos, pero que a mí me resulta interesante: One of Us, de Liam Gallagher.
El single fue publicado el 28 de Agosto de 2019, como parte del disco Why Me? Why Not. En él podemos encontrar el clásico estilo de Oasis, una de las bandas de britpop más famosas de todos los tiempos y que catapulpó a la fama tanto a Liam como a su hermano Noel Gallagher, allá por los noventa.
Ambos chicos, provenientes de un Manchester gris y deprimente, lo tenían todo para triunfar. Desde el carisma irreverente de Liam, a la idea del éxito de la clase media baja, cristalizada a través del talento de Noel, que parecía el auténtico corazón de la banda, aunque siempre apareciese en segundo plano. Sus canciones fueron casi igual de famosas (no hay nadie en el mundo que no conozca Wonderwall) que sus peleas. Conciertos cancelados, desapariciones misteriosas que daban pie a canciones como Talk Tonight… los hermanos Gallagher eran auténcias estrellas del rock, para lo bueno y lo malo. Eso hasta que llegó Agosto de 2009 y, en uno de sus habituales arrebatos, Liam discutió con su hermano y le rompió la guitarra contra una pared. Ocurrió cinco minutos antes de salir al escenario en París, y Noel, en ese momento, tomó la decisión de abandonar definitivamente la banda.
Desde entonces, no han vuelto a hablar o a verse, salvo en una o dos ocasiones muy puntuales. Pero en Twitter, Liam ha manifestado en muchas ocasiones que le gustaría no solo arreglar las cosas, sino también reunir la banda. Pero lo hace de una forma muy curiosa, ya que no deja de insultar, humillar y criticar a su hermano. En ocasiones se limita a llamarle “patata”, compartiendo fotos de Noel poco favorecidas, o incluso una imagen robada del cantante comprando leche en un supermercado, avisando de que había uno de aquellos payasos asesinos suelto por el pasillo quince. Aunque parecen chistes propios de un adolescente, Noel, las pocas veces que se ha referido al tema, ha dejado claro que cada uno de aquellos tweets es “un clavo más en el ataúd” de una posible reunión.
Lo interesante es ver que los hermanos no han parado de trabajar en todo este tiempo. Noel fundó sus High Flying Birds, con un estilo muy personal que ha ido evolucionando hacia el techno y sonidos más experimentales, mientras que Liam, tras fundar y disolver Beady Eye, parece estar encontrando estabilidad con su carrera en solitario. Así es como llegamos a One of Us, donde el macarra de ambos hermanos nos abre el corazón de una manera muy personal e inesperada.
La canción es un canto a la hermandad, la familia y la pertenencia a un grupo, con un videoclip rodado en blanco y negro por los responsables de Peaky Blinders, y una letra cargada de significado. Vemos a Liam caminar por un campo sembrado con fotografías de su infancia, entre las que Noel tiene un lugar preferente, y parece hablarle directamente, diciendo “ey chico, ¿Sabes que hace dieciséis años estuvimos juntos por última vez?” Una versión joven de Liam aparece siempre corriendo detrás de sus dos hermanos, Noel y Paul, con el primero, taciturno (una compleja historia de abuso familiar le convirtió en tartamudo), guiando el camino. Cuando ambos se encuentran y miran cara a cara, vemos la hostilidad de Noel hacia un niño rubio e inocente que, nosotros entendemos, parece haber vivido siempre siguiendo sus pasos, quizá lleno de admiración. El siguiente plano, con las sillas vacías (¿notamos el hueco entre ambas señalando no la ausencia de Paul, sino la distancia que los separa?), nos muestra a Liam, dolido y con una amplia sensación de abandono.
“Finge que no recuerdas que dijiste que viviríamos para siempre”, como referencia a una de las canciones más famosas del dúo, mostrándonos también la fatídica fecha de Agosto de 2009, día del famoso concierto truncado.
El videoclip acaba con Liam arrojando una rosa negra al agua, donde se aleja junto a dos más. Y levanta tres dedos.
Tres, en señal de sus hermanos.
Dos. Por Noel y Liam.
Uno. Por él, solo a partir de ahora.
Y en el sexto día, como no podía ser de otra manera, Dios creó MANchester.
#1 por sistemas de teletrabajo el 21 junio, 2020 - 14:10
Buenísimo artículo. Gracias por todos los datos y sobre todo por los videos.