El mayor error de ‘Terminator: Dark Fate’ es algo que Cameron ya sabía

Terminator es una de esas sagas que deberían haberse dejado en un cajón, pero el enésimo intento de resucitarla nos dejó, aparte de malas críticas y un fracaso, una de las escenas más polémicas y peor recibidas por fans de toda la franquicia. Como la película es reciente, voy a hacer un alto y darle a la pestañita de «leer más» para contaros el resto.

Pues bien. Cuando se anunció Dark Fate, vimos que regresaban tanto Edward Furlong como Linda Hamilton. Pero al joven John Connor le vimos muy poco. Casi casi, que ni le vimos, porque al principio de la trama, una escena plagada de CGI nos muestra cómo el joven John es acribillado por un nuevo terminator. La calidad de la imagen es sorprendente, comparada con otros rejuvenecimientos digitales que hemos visto en grandes películas de acción, pero lo triste es ver cómo después de más de treinta y cinco años intentando salvar a John Connor, vemos cómo se lo quitan de en medio de un forma bastante chapucera.

Lo malo no es eso. Al fin y al cabo, la muerte de Connor, regresando como ser medio humano medio cibernético, es algo que ya se ha dejado caer con demasiada frencuencia en la saga. El fallo viene cuando esa muerte, sucedida poco después de la segunda entrega, elimina por completo todo el esfuerzo que los personajes llevaron a cabo en Terminator 2, joya indiscutible del séptimo arte. Que tras dos horas de metraje nuestros personajes sean asesinados en un eplílogo le quita mérito a lo que hemos visto. Es la maldición de las secuelas. Pero también, sorprende ver que James Cameron fue quien ideó esa escena teniendo en cuenta lo muchísimo que se enfureción cuando David Fincher asesinó, en off y a en los primeros momentos de Alien 3, a la niña por la que Ripley llegaba a enfrentarse a la mismísima Reina Alien.

Sea como sea, Terminator es una de esas franquicias que ya no tienen arreglo.