‘ Guardians of the Galaxy’ – Ch-ch-ch-ch-ch-CHERRY BOMB!!!

Hace como un año, cuando los detalles de Guardians of the Galaxy empezaban a salir a la luz, muchos comentaban que este podría ser el primer gran fracaso de la Marvel, sobre todo por mezclar la space opera con lo que nosotros habíamos visto hasta entonces del mundo de Los Vengadores. Pero la película se ha estrenado y ha resultado ser un gran éxito tanto de crítica como público, al ofrecernos un producto algo más personal que todas las demás películas del universo de los superhéroes en una cinta tan entretenida como divertida.

No conozco nada de los cómics de Guardians, así que muchos desconfiaban del potencial de personajes como Rocket, un mapache bocazas y armado hasta los dientes, o Groot, su árbol guardián. Ni siquiera los ejecutivos de distintos estudios confiaron durante mucho tiempo en Chris Pratt, a quien rechazaron en películas como Star Trek o Avatar. Pero su sentido del humor, junto con la vena cómica y macarra de James Gunn, han sido capaces de sacar una gran película que he visto hace unas pocas horas y se acaba de ganar mi corazón.

En una época en la que las películas de superhéroes están a la orden del día, Guardians no se siente como si perteneciera a ese género, pareciéndose muchísimo más a las más divertidas películas de Star Wars, repleta de humor, acción y personajes carismáticos a quienes ya estamos deseando ver encontrarse con Iron Man, Capitán América o Hulk.

La historia es sencilla, y los mcguffin son similares a los de otras películas del estudio. Las gemas del infinito son un recurso para iniciar la acción, ero en realidad ni eso ni el argumento nos importan, sino que asistimos a un despliegue de humor negro, diálogos geniales y sencillos y un equilibrio entre la comedia, el optimismo, y un prólogo algo más duro de lo que esperaba, aunque tampoco demasiado. Si a eso le juntamos que Pratt nos cae genial y que absolutamente todos hacen un grandísimo trabajo (hasta Vin Diesel, que sólo repite una frase en toda la cinta), junto con una banda sonora repleta de clásicos, nos encontramos con una película disfrutable, que huye de la manoseada oscuridad que inició Christopher Nolan y que sólo busca hacernos pasar un par de horas entretenidas. Y ya está. Para qué buscarle más a una película de este tipo. Coged palomitas.