Antes de nada quiero dejar claras mis intenciones, para que nadie malinterprete mis «sermones» y en consecuencia pueda creer que un servidor es enemigo o reniega del cine actual. Nada más alejado de la realidad, pues me considero un ferviente defensor del buen cine. Y el buen cine, al igual que cualquier expresión artística con calidad, es intemporal. No estoy ni mucho menos en contra de los efectos digitales, y por supuesto no quiero con mis palabras desprestigiar ni desmerecer al cine de los tiempos en los que estamos. Simplemente pretendo resaltar y alabar con juicio la enorme destreza que poseía la mítica productora británica para crear obras rebosantes de brillantez y sensibilidad. Sin necesidad de hacer uso de crecidos y pedantes efectismos, ni de esos desorbitados presupuestos tan mal utilizados ahora. Intentemos recordar esa época en que el cine no era más que un imberbe adolescente que se dejaba influenciar por otras manifestaciones artísticas de las que supo «mamar» con cariño y a las que debe su carácter tan especial.
Si algo he aprendido, en todos mis años de consumidor del séptimo arte, es a saber apreciar y respetar a los clásicos. Pues es evidente e impagable la inmensa y justa deuda que tenemos con ellos. Escribiendo estos post dedicados a la Hammer pretendo recordar, homenajear y hacer justicia a esos tiempos no tan lejanos en los que cine y teatro eran dos hermanos inseparables. Dignos y abnegados hijos de la madre literatura, por la que mostraban un profundo amor y un sincero respeto. Tiempos en que la poesía se podía escuchar con los ojos y tocar con el alma sin necesidad de los actuales artificios tan subyugados a la destructora, vacía y omnipresente tecnología. Las palabras, ahora tan infravaloradas, eran afiladas dagas que se clavaban en nuestra alma con tanta fuerza que las heridas jamás cicatrizarían. El ineludible «tic tac» que produce ese malvado enemigo llamado reloj, ha desterrado al infierno del olvido a esos clásicos del cine. Y creo que es de justicia hacer un paréntesis mental, aparcando por un momento los recientes recuerdos cinéfilos y dedicar aunque solo sea unos momentos de nuestra memoria a recordar de dónde venimos pues es necesario para saber a dónde vamos.
Dicho todo esto, empezaremos este segundo y último post dedicado a las películas «más interesantes» de la Hammer revisando un clásico imprescindible del cine de terror: La momia ( 1959 ), que contaría de nuevo con los tres nombres propios más importantes de la productora , el talento de Terence Fisher en la dirección, la solvencia de Peter Cushing y la inmensa elegancia interpretativa de Christopher Lee. Acompañados con brillantez por la voluptuosa sensualidad de la bella actriz francesa Yvonne Furneaux . Esta obra magníficamente realizada es sin duda alguna un título muy interesante, no sólo por la triada protagonista, sino porque es un film de terror con todos los atributos más típicos del género pero salpicado con tintes del más puro cine de aventuras. En esta producción encontraremos muchos de los distintivos tan únicos de la Hammer, como el colorido tan personal de la productora británica, algo que siempre me ha encandilado. Un Christopher Lee por enésima vez metido en la piel del “ monstruo “ y magníficamente caracterizado. También hallaremos pinceladas de ese erotismo tan sutil que derrochaban todas sus producciones, y por supuesto un excelente trabajo de los actores bajo la exquisita batutade mi admirado Terence Fisher. Otra de las múltiples virtudes de esta cinta es la fotografía del genial Jack Asher, indispensable en muchas obras de la Hammer y de Fisher, al que acompañaría en numerosas ocasiones.
Otra obra a tener en cuenta en la extensa filmografía de la productora inglesa es El experimento del Dr. Quatermass, film que ya mencioné en el primer post de la Hammer –Sus comienzos-. Esta película es sin duda una de las más importante de todas las mencionadas en este post, no por su calidad( que la tiene a raudales ) si no por ser la obra que junto con La maldición de Frankenstein encauzarían el camino a seguir de la productora. Un film que generó buenos resultados de taquilla además de despertar una enorme expectación nunca antes vista desde el fenómeno generado por los clásicos de ciencia-ficción y terror producidos por la Universal. La intrigante y angustiosa atmósfera que nos brinda esta genial obra acompañada por una dirección magistral de Val Guest y una más que interesante trama excelentemente narrada, hacen de esta película un clásico imprescindible en la historia del cine fantástico. Se rodaron varias secuelas de este film, algunas de ellas de gran calidad e incuestionable interés cinéfilo, todas ellas producidas por la Hammer.
Hablemos ahora de otra obra interesantísima y notablemente dispar a los clichés tan propios de la productora británica. La Medusa (1964 ), basada libremente en un mito de la antigua Grecia. De nuevo con la fructuosa tríada clásica de la Hammer al frente de la producción ( Fisher, Cushing y Lee ). El argumento gira en torno a una mujer( Bárbara Shelley ) poseída por un espíritu maligno y que se ve envuelta en un destructivo triangulo amoroso. El nombre de Gorgona significa “ horrenda “. Las Gorgonas ( Esteno, Euríale y Medusa ), eran las ninfas guardianes del Jardín de Hespérides. Esta joya de la Hammer mezcla su genial terror gótico con tintes de la vieja mitología Griega y mostrando claros detalles de homenaje al clásico romanticismo Alemán de finales del siglo XVIII. Os recomiendo encarecidamente que le echéis un vistazo a esta curiosa obra maestra no sólo por la calidad narrativa e interpretativa que desprende por cada uno de sus poros, también mostrad especial atención a los preciosos decorados típicos del cine Inglés más clásico, y escuchad con interés la maravillosa banda sonora del maestro James Bernard.
Llegada la década de los 70 la Hammer viviría sus últimos años de esplendor debido a que el cine de terror estaba experimentando notables cambios, la productora británica seguía fiel a su estilo tan característico y personal pero evidentemente no debía ignorar las novedosas corrientes comerciales que iban dirigiendo el género de terror hacia otras perspectivas y nuevos horizontes. Fue en esa década cuando empezarían a fusionar su clásico terror con otros géneros con el fin de renovar sus ya obsoletas fórmulas que tantos éxitos les habían dado. La verdad es que el resultado de estos experimentos y mixturas fue ambiguo. Ya que debido a dichas fórmulas nacerían propuestas bastante interesantes y dignas de ser analizadas pero también obtendrían numerosos fracasos, tanto en calidad como en taquilla. Una de las producciones que podría considerarse como un acierto fue «El circo de los vampiros», que sin ser una gran película gozaría de ciertas características innovadoras y muy sugestivas que cambiarían los estereotipos clásicos del vampirismo. El circo de los vampiros ( 1972 ) dirigida por Robert Young nos ofreció una visión de los vampiros fresca , novedosa pero claramente “ irrespetuosa “ con las normas establecidas del clásico chupasangre ,por ejemplo en esta cinta los vampiros pueden procrear lo que significa que tienen órganos vitales en funcionamiento. Los no-muertos de esta producción también gozan de gran apetito sexual, evidentemente influenciado por el auge del erotismo en el cine esa época. En definitiva, un film de terror un tanto “ bizarro “ y sugerente, que sin ser una obra maestra( ni mucho menos ) resulta muy interesante y altamente recomendable.
Y para terminar el segundo post dedicado a las películas de la Hammer, añadiré dos films que olvidé mencionar ( muchas gracias Beatleg por recordármelo ) en el anterior post. Dos secuelas de Los Vampiros amantes( 1970 ) y que pertenecen a la llamada trilogía Karnstein. Lujuria para un vampiro ( 1971 ) y por último la interesante Drácula y las mellizas ( 1971 ). Todas ellas basadas en la obra literaria Carmilla del escritor irlandés Joseph Sheridan Le Fanu , una magnífica obra del genero gótico y de vampiros que inspiró al mismísimo Bram Stoker. De las tres películas que forman esta curiosa trilogía basada en los escritos de Le Fanu las más recomendables son Los vampiros amantes y Drácula y las mellizas, primera y tercera parte respectivamente, aunque a un servidor les gustan todas.
Después de señalar estas brillantes obras de la Hammer, si me lo permitís, me apartaré un poco del tema que nos atañe . Cuando hablamos de cine de terror la percepción es notablemente dispar y relativa a nuestra edad, es evidente que cada generación tiene sus particulares “ miedos “. Los treintañeros como yo recordarán films como Pesadilla en Elm street , la interminable saga de Viernes 13,o la graciosa Poltergeist . Pero la cosa cambia si nos remontamos un poco más atrás en el tiempo , más o menos a la época en que nuestros padres eran jóvenes, entonces encontraríamos obras como La profecía (gran película de Richard Donner), El exorcista (de William Friedkin) o la excelente y angustiosa La semilla del diablo (de Roman Polanski). Pero en la actualidad el cine de terror ha sufrido (al igual que todo el cine en general) notables cambios, mostrándonos vampiros que caminan bajo el sol y asisten al instituto (cosa bastante meritoria si tienes 100 años, pues a mí cuando tenía 17 ya me costaba sudor y esfuerzo), hombres lobo cachas y descamisados a los que inexplicablemente solo se les rompe toda la ropa al sufrir la transformación pero dejando los “ gayumbos “ y los pantalones misteriosamente intactos, o asesinos apasionados por los puzzles que rozan la ridiculez más extrema pero que sin embargo llenan los cines de gente ávida de sangre fácil y preocupante morbo. Toda esta verborrea y disertación tiene una fácil explicación, ayer vi Luna Nueva y estoy un poco susceptible, pues en todos mis años de consumidor compulsivo de cine de terror ( si es que se puede clasificar como cine de terror a la saga Crepúsculo ) nunca había visto un film tan irrespetuoso con las normas básicas de este género, ni una gota de sangre en toda la película, ni un colmillo, ni siquiera un miserable ataúd. Después de ver semejante despropósito, verdaderamente preocupado me pregunto hacia donde nos llevará esta corriente. Por una parte tenemos la rentable fórmula de Saw, que con sus rebuscados y sangrientos asesinatos destila evidentes influencias del gore más extremo y revienta las taquillas de los cines, y por otro lado tenemos a los vampiros guaperas, luminiscentes, suicidas y sin colmillos que provocan un espeluznante fanatismo. Dos extremos infinitamente opuestos pero evidentemente rentables. Toda esta palabrería me lleva a recordar tiempos en que los vampiros se alimentaban de sangre humana y tenían colmillos, habitaban en tenebrosos castillos, descansaban en ataúdes y que por supuesto no decoraban con su imagen las carpetas “ superpoperas “ de las adolescentes, tiempos en que los hombres lobo feos y peludos se comían a todo bicho viviente, en definitiva tiempos en los que el cine de terror era eso, CINE DE TERROR.
HAMMER FILMS PRODUCTIONS.
Sayonara!
#1 por Beatleg el 13 diciembre, 2009 - 01:16
Me parecen muy interesantes y acertadas tus reflexiones respecto al estado actual del cine de terror, tanto las que haces en este último post como las que hiciste en el primero de la serie.
Si te soy sincero a mi se me está olvidando lo que se siente después de ver una película de terror de verdad. De hecho se pueden contar con los dedos de la mano aquellas que en los últimos tiempos me han movido algo por dentro: ‘El exorcismo de Emily Rose’, ‘Dawn of the dead’, ¿quizás ’40 días de oscuridad’? El género está en crisis. Que alguien llame a John Carpenter 🙂
Por cierto, gracias por mencionarme.
P.D: Espero con mucho interés el estreno de The Wolfman.
#2 por Harry Powell el 13 diciembre, 2009 - 05:17
Beatleg, yo tb espero con mucho interés The Wolfman, tiene una pinta estupenda.Me sorprendió la atmósfera tan Hammer que tenía el trailer, y tb me pareció muy acertada la imagen del hombre lobo. Un claro homenaje a los clásicos de la Universal y la Hammer.
Saludos.
#3 por licanTOPO el 15 diciembre, 2009 - 00:39
mmmm….a ver como suparas esta trilogia majete…ya puedes empezar a pensar jajajajaja, genial la trilogia ahora se corresponde una precuela?? o ya seria demasiado.
un abrazo
#4 por Harry Powell el 15 diciembre, 2009 - 02:08
Bueno licanTOPO ya estoy en ello, lo siguiente y último será mostrar algunas de las influencias que han producido en interesantes directores como Polanski,Burton,etc. No me extenderé mucho,creo que ya me enrollado demasiado y me apetece cambiar de registro tb. Un abrazo.
#5 por Uno que pasaba... el 15 diciembre, 2009 - 10:19
Crepúsculo es un drama-romántico en el que, casualmente ;-), aparecen algunos vampiros y licántropos. Pero de Cine de terror no tiene nada, como tampoco lo tenía El jovencito Frankenstein 🙂
#6 por Snake el 15 diciembre, 2009 - 10:29
O «Van Helsing», o «Underworld»… 😛
#7 por licanTOPO el 17 diciembre, 2009 - 01:10
ultimo?? define ultimo, lo dejas???
#8 por Harry Powell el 17 diciembre, 2009 - 03:53
No lo dejo hombre, me refiero que escribiré el último post dedicado a la Hammer.
#9 por Snake el 17 diciembre, 2009 - 09:45
Ya te puedes ir pensando posts y más posts sobre la Hammer. Que has sido nombrado autor oficial de dicha productora. La de trabajo que te espera 😛
#10 por Harry Powell el 17 diciembre, 2009 - 10:01
jajajajjajaja, no Snake gracias pero acabaria harto de tantos vampiros y eso no quiero que ocurra porque me encantan las vampiras pechugonas de la Hammer. Ahora necesito un cambio de registro y estoy en ello.Saludossss majetes.
#11 por LoveCraft el 7 enero, 2010 - 23:04
Harry me encanta como escribes. Ya era hora que alguien hablará de la Hammer con tanta devoción y respeto. Me gustaría que escribieras tú un post sobre Howard Philips Lovecraft.Estoy segura de que también te gusta ( se nota y lo sé)saluditos.
#12 por LoveCraft el 8 enero, 2010 - 00:35
Tu forma de escribir es muy poética y convincente. Consigues que quien te lee se sienta comodo y sin proponertelo. Pero se nota mucho que odias crepúsculo.
#13 por Legoland el 1 septiembre, 2010 - 23:49
Magnífica serie de artículos, gracias por la recomendación.
No todas las he visto, pero en las que sí he visto estamos bastante de acuerdo en todo lo dicho. Deseando estoy que pasen los exámenes de septiembre para sentarme tranquilo, con algunos amigos, a verme de seguido todas las que mencionas =)