Por más que hayamos comprobado, en repetidas ocasiones, que es mucho más fiable fijarse en quién firma la película que en quién o quiénes la protagonizan, no dejamos de caer en el juego. Ese juego, preparado hasta el último detalle, que fue, es y seguirá siendo el «star system», muy vivo, aunque mutado, seguramente para peor.
Y es que, salvo algunas excepciones (porque ellos también pueden entrar en el juego) los directores siguen siendo, para la mayoría, unos personajes desconocidos, unos empleados, que se limitan a situar la cámara y dejar que los actores, las estrellas, hagan su trabajo, interpretando ese guión que también han escrito otros empleados, otros personajes anónimos; éstos aún más, aunque eso también les salva de sufrir las iras del público, porque vaya historietas más lamentables, llenas de clichés y tópicos, se sacan de la manga últimamente (hablo en general).
La casualidad ha querido que en pocos días haya visto dos películas como ‘Cuestión de honor’ y ‘La lista’, que son, claro, las que han motivado que me ponga a escribir esta columna. La primera se estrenó a primeros de enero y la segunda no acumula más que retrasos (y no me extraña) pero parece que finalmente estará en los cines el próximo 3 de abril. Os aviso con tiempo: no perdáis ni un euro en ella.
Pero vamos al tema, a lo que me parece injustificable. Ojo a los repartos de ambas películas. ‘Cuestión de honor’ está protagonizada por Edward Norton y Colin Farrell, mientras que ‘La lista’ tiene a Ewan McGregor y Hugh Jackman como cabezas de cartel.
Independientemente de lo que cada uno pueda opinar sobre estos actores, lo cierto es que están considerados como estrellas, y ni el público ni la crítica los tiene por «malos actores», sino más bien todo lo contrario. Los cuatro tienen en su filmografía títulos muy destacables en los que han ofrecido interpretaciones de calidad.
Norton es uno de los actores más valorados (sobrevalorados diría yo, y eso que hay interpretaciones suyas que me encantan) del panorama actual, gracias a su trabajo en títulos como ‘Las dos caras de la verdad’, ‘American History X’ o ‘El club de la lucha’. McGregor también es muy respetado, es uno de mis favoritos (la verdad por delante) desde que lo vi en ‘Trainspotting’ y creo que en películas como ‘Moulin Rouge!’ o ‘Big Fish’ demuestra su gran talento.
De los cuatro, creo que podemos estar de acuerdo en que ellos son los dos mejor valorados. Pero Farrell y Jackman son también dos estrellas muy populares que han tenido sus momentos de gloria, como actores. El primero me convenció por primera vez en ‘La última llamada’ y ‘Escondidos en Brujas’ sólo le está reportando buenas críticas; el segundo ya me gustaba como Lobezno, pero fue viendo ‘La fuente de la vida’ cuando pensé que también podía ser un excelente actor.
Entonces, si son populares, tienen dinero, prestigio, el público y la crítica de su parte… ¿por qué siguen haciendo malas películas? ¿Qué les pasa por la cabeza cuando deciden actuar en películas como las señaladas? Particularmente graves me parecen los casos de Norton y Jackman, porque el primero lleva años presumiendo de elegir muy bien sus papeles, y no han sido pocos los que han hablado de que tiene un carácter difícil y que controlar los proyectos en los que se embarca. ¿Qué narices vio en ‘Cuestión de honor’? Yo no lo entiendo, el suyo es un personaje desdibujado y de poca profundidad, sin nada que aportar.
Pero igual de incomprensible me resulta que Jackman sea uno de los productores de ‘La lista’. ¿Producir eso? ¿No se dio cuenta de que la historia estaba mal escrita y que el director no sabía lo que hacía? No me imagino que este tipo tenga problemas para poner su dinero y su tiempo en proyectos más interesantes. O que tenga que anteponer el trabajar aquí a ponerse a las órdenes de directores más capaces, mejores.
Supongo que todo se resume a dos cosas: dinero y compromisos. Pero lo del dinero sigo sin entenderlo, en casos como éstos, actores que aún tienen mucho por delante y que ya han ganado lo suyo. Pero puede que piensen en inversiones futuras o en proyectos de los que aún no sabemos nada (como Spielberg, que rueda cine comercial para pagarse luego las películas que realmente quiere hacer).
La cuestión es que pienso en alguien como George Clooney, que se está formando una carrera envidiable, como actor y director, y no comprendo qué les pasa por la cabeza a los cuatro señores que aparecen en las fotografías para trabajar en semejantes productos. Lo único que consiguen, a mi entender, es rebajar su estatus y perder credibilidad. Porque el público no es tan idiota como creen. En cualquier momento se les baja del pedestal y luego no es tan fácil volver a subir. Espero que se den cuenta y recapaciten. Son buenos actores. Sólo tienen que pensar un poco más donde se meten.
PD: Curiosamente, los cuatro han trabajado con Woody Allen, uno de los mejores a la hora de aprovechar el potencial de su reparto.
Fdo: JL Caviaro
#1 por Karelia el 9 marzo, 2009 - 17:49
Pues ademas de ganar dinero por hacer poca cosa, que van a hacer estas estrellas en este tipo de películas???
#2 por Snake el 9 marzo, 2009 - 18:36
«La cuestión es que pienso en alguien como George Clooney, que se está formando una carrera envidiable, como actor y director, y no comprendo qué les pasa por la cabeza a los cuatro señores que aparecen en las fotografías para trabajar en semejantes productos.»
Ejem. Clooney tambien hizo una ¿película? llamada «Batman y Robin». Y una con Jennifer López que prefiero no acordarme. En los últimos años ha estado encauzando su carrera, pero fiascos tambien los ha tenido.
«Supongo que todo se resume a dos cosas: dinero y compromisos»
Más razón que un santo. Sólo voy a poner dos ejemplos sobre eso. Porque otra explicación no tengo. Michael Caine en «En Tierra Peligrosa» y Sean Connery en «Los Vengadores».
«Curiosamente, los cuatro han trabajado con Woody Allen»
Bueno, eso puede haberse debido a alguna alineación de planetas que se produce cada mil años. O algo por el estilo. Además, desde que Allen le va dando papeles a su nueva musa, Scarlett Johansson (la cual es más sosa que un plato de lechugas sin aliñar -no hablo de sus cualidades interpretativas para no echarme a llorar-), no me fio mucho de a quienes elige para sus películas.
Un buen tema el que has tocado JL. Cada día hay más estrellas y menos actores. Hace años incluso podían compaginar ambas cosas. Ahora…
#3 por Carcayud el 9 marzo, 2009 - 18:49
El motivo es simple, si los que leemos esto tuviéramos:
Una casa de 800 m2.
2 sirvientes.
Fiestas cada 10 días.
3 coches que chupan como Jenna Jameson.
Un yate.
Un jet privado.
Otra casa en Aspen.
Una exmujer que me sangra como Nosferatu.
2 amantes que van a lo que van.
Trabajarías tú, una estrella del cine en una patraña del calibre de Corrupción en Miami por 1 millón de dolares? Yo, si.
Ejemplo: Robert de Niro, ayer y hoy (De El Padrino, Érase una vez en América, Taxi Driver, Goodfellas.. a ….. Meet the Fockers).
Larga vida a Daniel Day-Lewis… 😛
#4 por Alice el 9 marzo, 2009 - 19:11
Como bien se ha dicho anteriormente,tienen que hacer de todo.Yo creo que más bien por (favores) que por necesidad económica..Aunque luego,algunos de sus trabajos caigan en el olvido,no creo que les preocupe mucho.Pero actores como los mencionados,podrían elegir un poco mejor lo que hacen,aunque sólo fuera por sus seguidores.